Una cerveza fría, por favor. Con cuarto y mitad de espuma. Un taburete vacío junto a mí, y una lámpara con dos focos fundidos son mi única compañía en aquel lúgubre lugar. Mis labios, cubiertos con aquel líquido dorado, bañado bajo las olas de espuma culpables de la bandera roja que impide a mis labios saborear algo más de aquello que me ayudará a olvidar, pronuncian tu nombre una vez más. Cógeme en brazos y llévame a casa. Limpia con tus labios la espuma de los míos. Desgarra con tus manos aquel pijama rosa de flores que tanto te gustaba quitarme. No me dejes que haga más tonterías. Si tenemos la capacidad de soñar, es porque podemos cumplir los sueños, ¿no? Sácame de aquí, ni siquiera sé como he llegado a este lugar. Desintoxícame de tus besos. O mejor no. Deja que siga jugando con el fuego que me das.
Allí, donde las cosas imposibles no existen, donde los sueños se cumplen .Donde las sonrisas están por todas partes .Las lágrimas se compran para ocasiones .Allí, donde los te quieros sobran, & los te odios están extinguidos .un lugar en el que podría vivir el resto de mi vida. Un instante en el que vuelas sin alas.
sábado, 7 de enero de 2012
Sería capaz de subir al palo mayor para que todos se enteraran y que lo escuchara hasta la última persona del mundo, hasta quedarme sin voz.
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